Pues no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el evangelio; no con sabiduría de palabras, para que no se haga vana la cruz de Cristo. (1 Corintios 1:17).
Estamos tomando versos de las epístolas del apóstol Pablo enviadas a los corintios, ya que afirma que entre ellos fueron hechas las señales de su apostolado.
Podemos tomar como dichas señales los milagros y prodigios y señales hechas por Dios a través suyo (de Pablo).
Otra señal sería su forma de predicar, no con sabiduría de palabras, sino con sencillez.
... y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder. (1 Corintios 2:4).
Dice la palabra de Dios que Él, abate a los soberbios y da gracia a los humildes.
El apóstol Pablo actuaba con sencillez, sin lucimiento personal.
El Señor Jesús desea que seamos mansos y humildes como Él, y por lo visto, Pablo alcanzó dicho hermoso estado:
Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo. (1 Corintios 11:1).
Comprobémoslo otra vez:
Yo Pablo os ruego por la mansedumbre y ternura de Cristo, yo que estando presente ciertamente soy humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con vosotros. (2 Corintios 10:1).
Porque a la verdad, dicen, las cartas son duras y fuertes; mas la presencia corporal débil, y la palabra menospreciable. (2 Corintios 10:10).
Eso de "la palabra menospreciable" por supuesto que no se refiere a la predicación sino probablemente al modo de predicar del apóstol. Quizá era tan humilde que hasta lo menospreciaban.
Porque nuestra gloria es ésta: el testimonio de nuestra conciencia, que con sencillez y sinceridad de Dios,no con sabiduría humana, sino con la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo, y mucho más con vosotros. (2 Corintios 1:12).
De nuevo aparece la sencillez, o lo que es lo mismo, el no lucimiento personal.
Ojalá esté usted de acuerdo con el siguiente resumen acerca de cuáles son, pues, las señales de apóstol o del apostolado:
Yo Pablo os ruego por la mansedumbre y ternura de Cristo, yo que estando presente ciertamente soy humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con vosotros. (2 Corintios 10:1).
Porque a la verdad, dicen, las cartas son duras y fuertes; mas la presencia corporal débil, y la palabra menospreciable. (2 Corintios 10:10).
Eso de "la palabra menospreciable" por supuesto que no se refiere a la predicación sino probablemente al modo de predicar del apóstol. Quizá era tan humilde que hasta lo menospreciaban.
Porque nuestra gloria es ésta: el testimonio de nuestra conciencia, que con sencillez y sinceridad de Dios,no con sabiduría humana, sino con la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo, y mucho más con vosotros. (2 Corintios 1:12).
De nuevo aparece la sencillez, o lo que es lo mismo, el no lucimiento personal.
Ojalá esté usted de acuerdo con el siguiente resumen acerca de cuáles son, pues, las señales de apóstol o del apostolado:
- Dios hace milagros extraordinarios a través de sus apóstoles.
- La predicación base es el evangelio.
- En el apóstol queda excluido todo lucimiento personal.
- La predicación es sencilla, sin palabrería.
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